Si de vez en cuando sientes un dolor agudo en los dientes al tomar una bebida fría o un alimento muy caliente, es posible que sufras lo que habitualmente se conoce como hipersensibilidad dental. Si has llegado a este artículo, seguramente ya sabes que la hipersensibilidad dental no solo es incómoda, sino que también puede ser un síntoma que indica que existen otros problemas de salud bucodental y, por eso, en este artículo queremos hablar del tema en profundidad.
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¿Qué es la hipersensibilidad dental?
La hipersensibilidad dental ocurre cuando el esmalte que protege nuestros dientes se desgasta o cuando las encías se retraen en exceso. Esto deja expuesta la dentina, una parte del diente normalmente protegida que contiene canales microscópicos llamados túbulos dentinarios. Cuando los estímulos externos como el frío, el calor, o incluso el azúcar alcanzan estos túbulos, pueden provocar un dolor breve pero intenso que afecta directamente a los nervios del diente y que, poco a poco, terminan afectando negativamente a nuestra calidad de vida.
¿Cuáles son las causas de la aparición de la hipersensibilidad dental?
Hay muchos motivos que pueden llevar a que suframos de hipersensibilidad pero, si tuviésemos que destacar algunos de los motivos, el primero que entraría en la lista es el de cepillarse los dientes demasiado fuerte o el uso de un cepillo de dientes de cerdas duras que pueda desgastar mucho el esmalte de tus dientes. Esto suele ocurrir también si eres de esas personas que disfrutan comiendo alimentos y bebidas ácidas con mucha frecuencia, ya que contribuye a facilitar la erosión del esmalte. Además, las enfermedades que afectan a las encías y que dejan al descubierto la raíz de los dientes, suelen provocar un aumento de la sensibilidad.
Tipos de hipersensibilidad dental
Principalmente, hay dos tipos de hipersensibilidad que ocurren con más frecuencia:
- Hipersensibilidad dentinaria: Es la más común y ocurre cuando la dentina queda al descubierto por el desgaste del esmalte o por problemas en la encía.
- Hipersensibilidad pulpar: Es menos común y está relacionada con la salud de la pulpa dental. En la práctica, este tipo se hipersensibilidad se produce cuando tenemos caries graves o hemos sufrido algún golpe en los dientes.
¿Podemos prevenir su aparición?
Vamos a lo importante: ¿existen formas de evitar la hipersensibilidad? Lo primero que tienes que tener en cuenta es que la prevención parte de la necesidad de seguir buenos hábitos de higiene. Usar un cepillo de dientes de cerdas suaves y evitar los movimientos agresivos durante el cepillado son pasos básicos que deberías cumplir si quieres proteger tus dientes. Intenta limitar el consumo de alimentos y bebidas muy ácidos y si eres propenso al bruxismo, plantea seriamente usar una férula nocturna para proteger tus dientes mientras duermes.
Tratamientos para la hipersensibilidad dental
Si eres de los que ya padecen este problema, vamos a darte algunas soluciones que pueden hacerte mucho más sencillo tu día a día. Si quieres reducir el dolor, te recomendamos que pruebes los dentífricos desensibilizantes ya que contienen compuestos que ayudan a bloquear la transmisión de sensaciones de los dientes al nervio. Otra opción muy recomendable es que empieces a usar colutorios con flúor destinado a fortalecer el esmalte y reducir la transmisión del dolor.
Si el problema de la sensibilidad viene por la recesión de las encías, puedes optar por procedimientos muy específicos como los injertos que pueden ayudar a cubrir las áreas expuestas por la falta de encía y reducir mucho la sensibilidad.
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